Todos luchamos con lo mismo, aún aquellos que nos hacen creer que son tan santos y están en un nivel de unción tan alto, que el diablo ya no los puede tentar. Si Jesús fue tentado en todo (aunque algunos creen que solo fueron tres veces aisladas durante los cuarenta días) quienes somos nosotros para creer que ya no tendremos que luchar contra nuestra carne? Es más, cada vez que oigas a alguien hacer alarde de su unción y de su inquebrantable santidad, significa que las alarmas ya están sonando y que en realidad ese líder está luchando con algo mucho mas grave de lo que imaginas. La historia es testigo que cada vez que algún predicador levantó su dedo acusador (lo cual no estaría mal si defiende la santidad) pero se pone el mismo como ejemplo inmaculado, es porque se avecina la catástrofe. Por algo Billy Graham nunca se cansó de decir: “Muchachos, no bajen la guardia nunca, aún sigo siendo tentado como cuando era un muchachito” y Dios le dijo a Josue: esfuerzate y se valiente ¿cuanteas veces? en Josue 1 ( 1 pelado ); y otro predicador que no mencionaré su nombre, cada vez que se disponía a hablarles a los jóvenes acerca de la pureza sexual, comenzaba diciendo: “Antes que nada les diré que la masturbación produce dos cosas nocivas muy importantes: la falta de memoria…y ahora no recuerdo la otra!!!!”